miércoles, 19 de marzo de 2008

Te contarán de Juan Luis... ¿Es lo que mi corazón necesita?

Voy a coronarte con cantos de arena y escribiré un poema de contemplación.
Voy a resolver la tesis de tu oreja. Proclamaré un teorema de éste gran amor, oye.
Te contarán, la luna y las estrellas. Te contarán, los cielos del camino.
Te contarán, que no hay sobre la Tierra un corazón que te ame igual.

Un gran amor, un pequeño amor.
Ruego a Dios que nunca se extinga el cosquilleo de verte, la mirada complice, el color de tu risa. Disfrutaré tanto el día en que pueda mirarte a los ojos, caminar junto a ti. Y no a tu lado. Caminar con tus pasos. Y que seas la ola que borré las huellas... Ser amanecer, hoja en blanco...
Enamoramiento!!!! Full. Me emamora enamorarme del amor.

sábado, 8 de marzo de 2008

Me gusta creer que si.

Antes de ayer viniste a visitarme, mujer de agua. Y se que quieres hacerme creer que eres parte de mi, que yo te invito a mi casa. Estas muy equivocada, tu me invitas a algo de lo cual no estoy segura. Llenas mi cuerpo de esa sustancia que me dificulta caminar con la frente en alto. Pesas dentro de mi, no dejas que mis ojos vean la realidad. No te das cuenta que quiero liberarme. Que me estoy enraizando, donde nunca quise estar. Llevo cadenas en mis pies, y no puedo pasar sin hacer ruido. Y a la vez todas las cosas corren ante mi, y nadie puede esperarme. No crees que es injusto... Tu debes marchar y dejar de hacerme vulnerable.
También me visitó el pequeño niño de amor. Cuando por fin decidió entrar a mi casa, sentí como si lo conociera de toda la vida. Era el momento de decircelo, tal vez ni lo sospechaba. Era un plan casi perfecto, destellos de estrellas a pesar de tener dirección se desviaban. Tal vez por que me inyecté un antidoto contra él. O quizás tu te encargaste de ocultarme con tu manto frio, mujer de agua. Tal vez por que mis mensajes no eran claros. Pero me resigné por el cariño que sentía por él. Dirrección predeterminada tenían sus palabras. Mientras más aumentada el sentimiento, más me encargaba de reprimirlo. Y si mi corazón hablaba, mi mente gritaba. ¿Gran error? Nunca lo sabré. Pero lo dejé libre, para que el amor se volviera más grande. Para que ese día de enero, fuera recordado como una lección. Más que por un gran error, quizás.
Y así fue como me di cuenta, si realmente era lo que quería nunca debí alejarlo de mi lado. Pero ya era demaciado tarde, vaciaste el armario, sacaste las maletas de la habitación. Y yo, apoyada en el marco de la puerta viendote partir. La almoada nisiquiera recuerda tu olor. Te alejaste y no hay vuelta atrás. Pero te quiero. No de la forma que todos creen que tengo que quererte. Te quiero cerca pero no conmigo.
Y para agrarle más cursilerias, un amargo tanto a lo lejos se escucho. Lo explicó todo, el golpe en la puerta rompió todas mis ilusiones. Las mismas que en la noche anterior dejaste en la almoada. Humillada traté de recogerlos. Los junté pero extrañamente las piezas habían perdido su forma, se desconocías. Como si nunca hubieran sido parte de algo tan lindo. No mires atras, se que no lo vas a hacer. Pero me gusta creer que si. Tal vez así sienta que puedo ganar por lo menos alguna vez en este maldito juego en el que sin saber cómo apareció un tercero.
Mujer de agua, lamento haberte echado de mi casa. En estos momentos eres bienvenida...

sábado, 1 de marzo de 2008

Lección del día.

Si juegas, que sea con la mente muy fría. Pero hay juegos que son de a dos.
Dos mentes jugando a neutralisar pensamientos dejandose llevar por caricias y placer. Bebiendo del mismo licor. Embriagados, sin duda. Pero disimulando el estado. En un juego en el cual nadie ganará. Pero aún asi jugamos. Sin razón y derecho. Jugamos y seguimos jugando. Como los niños que deben entar a casa, pero no quieres.
Dos mentes. Pero había un corazón. Uno que no era ni tuyo ni mio. El cual escuchaste, al cual fuiste ....


Tu sabes el resto.
¿Jugemos denuevo?


JAMÁS.

jueves, 28 de febrero de 2008

Día a Mañana.


¿Cuando ocurrió? Nunca me imaginé que yo podría llegar a vivir el día a día. Creo, sospecho; fue cuando me di cuenta que vivía en un mundo de fantasías. En una novela en donde la protagonista luchaba por una felicidad falsa y sufría por que era un deber. Sufría para que su mente no la cuestionara. Sufría para que su corazón tuviera un pasa tiempo. Lamentablemente se enamoró. Lo lamento, y no me retracto. Es triste, no era el mejor de los amores. El primer amor, lleno de cosas tan falsas. ¿Y lo bueno? Bien gracias, estan muy guardados. Son recuerdos que respeto tanto que nisiquiera me gusta recordarlos. Respeto.

Volviendo al tema. Vivir el día a día es sano, siempre y cuando tengamos presente lo bueno de cada uno. También juega un rol importanticimo la manera de enfrentar los abatimientos de la vida. Deben ser olvidados lo más rápido posible.

Contradicción; no se si soy yo la del problema...

¡El día a día es mucho más tormentoso que pensar en el mañana!

Ejemplo 1: Si vivo el día a día, y no te perdono hoy. Mañana no lo haré.

Ejemplo 2: Hoy no puedo olviarte, pero no puedo dejarlo al tiempo. Vivo el día a día.


¿Por qué no podemos encaminarnos pensando en el mañana?

Estoy feliz por que se que tengo toda una vida por delante. Para hacer todo, y si hoy te odio. Tal vez mañana te odie más.

De ahora en adelante viviré el Día a mañana.

domingo, 17 de febrero de 2008

Un lindo regalo.


¿Cuál es el color del cielo?, creí conocerlo hasta hoy. Les cuento, el amanecer me dio un regalo. Venía muy muy embuelto. En un papel realmente ordinario. Con un color ordinario, sin brillos, sin dedicación. No deceo desmerecerlo, pero nada me motivaba a abrirlo.

Luego el atardecer me dijo que me tomara mi tiempo, pero era necesario abrir el desmotivador regalo. Sin darme cuenta estaba dentro de una caja de sorpresas. Era la caja más hermosa que había visto jamás. Mil y una vez me regalaron cajas de sorpresas, pero ninguna era tan linda. Era muy pero muy pequeña, sin embargo me inundó que una felicidad enorme. Esa caja era paz, llena de amor, llena de ilusiones, tranquilidad. Extaciada me encontraba cuando decidí observar que contenía mi regalo. Quité los papeles y no pude encontrar nada más que un espejo adosado al fondo de la cajita. Y tenía un pequeño mensaje que decia:


El mejor regalo que me pudiste dar eres tu, quiero compartirlo contigo.


Luego respiré, miré al cielo y dije. Tus matices son eternos al igual que mi vida. Increiblemente quiero pensar que el cielo no tiene un color definido, algunos días gris y al otro me inundas de un azul intenso. Más tarde fui a la cama, pero nunca más pude despertar.

¿Quieres soñar conmigo?

sábado, 16 de febrero de 2008

Mi vida en estos días.


Sólo algunas veces me pasa.

Tengo ganas de girar al compás del mundo.

Ensuciarme con la tierra, bailar con el viento.

Que alguien que nunca en mi vida pense conocer,

tome mi mano y me diga que lo sigua.


Sólo algunas veces me pasa que tengo miedo.

No quiero seguir algo que no se donde llegará.

Tal vez la tierra nunca fue redonda y caer al

vacío es lo que menos necesito en este momento.


También me pasa algunas veces,

que no puedo dejar de mirarte.

Mas a veces no te sueño, y creo que te he olvidado.

Mas vuelves a entregarme el tesoro de tu amor.

El cual creí que hace años perdí, de eso estaba segura.

Estaba, ya que tus ojos dicen lo contrario.


Si decides volver, te advierto que mi corazón no esta del todo bien.

Si aún así decides volver, creeme que no será cosa de minutos.

Si aún a pesar de eso decides volver, acostumbrate a las lagrimas. Aunque preferiria que me ayudaras a limpiarlas.

Y si realmente quieres volver, creo que los años son sabios. Mi amor será solo para ti.




jueves, 31 de enero de 2008

Para alguien que nunca existirá

Estoy. Si, indiscutiblemente. Llena de dudas estoy. Preguntandole a la luna si quiere que mi cuerpo sea manto. Manto para los dioses, agua para calmar la sed de una luz incesante. Esa luz que tintinea vida, pero la cual no quiero ver. Reniego mi esencia, fuera de lugar. No eres bienvenido, te equivocaste de cuerpo. Tu lugar esta lejos, o muy cerca. Depende de la forma e que lo mires. En el cielo o en un tacho de basura. Si quieres sumergirte en un mar de vida, muy lejos de aqui. Si quieres llenarte de luz, muy cerca no lo encontrarás. Tu pequeña mano, nunca tocará mi pecho. Tu dulce mirada solo traerá muerte. Mi mente te asecina lentamente...

Se que quieres venir, pero nadie te invitó...